Existimos porque alguien piensa en nosotros y no al revés

domingo, 6 de febrero de 2011

11310



Una droga, y como acompañante su síndrome de abstinencia,
es eso en lo que te he convertido, una adicción,
donde me arropan las ganas y ansías de ti.
Porque cuando te toco,
la suavidad de la que te ves envuelto
es capaz de transportarme a lugares maravillosos,
pero cuando te tomo, tú, sustancia,
me acojes cada vez más rápido
creando una dependencia que corrompe a ciegas.

Las adicciones nunca han sido buenas, ni siquiera en temas de amor...

1 comentario:

  1. 11310? 11 de Marzo de 2010? Puedo imaginarme la adicción...
    Creo que nunca ha sido bueno engancharse a nadie. La dependencia no es buena mediadora en estos asuntos.

    ResponderEliminar