Casual como aquel café descongelado después de tantos años.
Desconcertante como aquella pregunta fuera de tiempo y espacio.
Emocionante como el suceso que hace que pare toda una vida.
Su encuentro con él, había sido inesperado, como un accidente,
una colisión fortuita pero que agradecería eternamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario