Existimos porque alguien piensa en nosotros y no al revés

viernes, 27 de mayo de 2011

Contratiempo.



Ocurrió lento, progresivo, circundante,
premeditado, pero abierto a cualquier desvío imperante.

Insidioso, seductor, sensual, casi agonizante,
placentero, pero coloreado de la excitación más impresionante.

Y como ocurrió, pasó, se marchó,
formando parte de un delirio en el resquicio de la alucinación.

2 comentarios: